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Río Frío y arroyo Salado 12.04.14
Muy buenas!! ¡Volvemos!!
Unión de los ríos Riofrío y Salado
Volvemos a la carga con una zona muy entrañable y que much@s relacionaréis directamente con el pez de río más afamado en nuestra provincia sin lugar a dudas, la trucha.

Puente sobre Ríofrío
Es complicado desligar Riofrío municipio del propio río Frío (Riofrío, como prefiráis) en sí, valga la redundancia. Cuando un núcleo urbano no se puede desligar de su cuenca ni en el nombre, llega a entenderse cuan ligada está la vida de sus gentes al río y a su vida. Y es que en este agradable núcleo de la municipalidad de Loja, no encontrarás a un vecino que no conozco del tramo, de su pesca y de su ambiente natural único.
Y es que esta pedanía de Loja es única en su posición paisajística y su inigualable valor natural y cultural. Y dentro de su cultura, el respeto al agua es parte de la genética y su impronta se deja ver en cada rincón. De ese modo, podemos ver desde que llegamos al pueblo un sinfín de buenos restaurantes donde el plato estrella es, como no, la trucha. Muy recomendable parada, descanso, paseo y trucha al horno con jamón, ahí lo dejo.
El respeto a la trucha es en parte el conseguidor natural de un mayor respeto a la cuencas que riegan esta pedanía, que no el único motivo ni mucho menos. Si es cierto que desde el 1665 aproximadamente se bien usando los ríos y arroyos de la pedanía como cotos de pesca. Actualmente incluso en verano los cauces del río Frío y del río/arroyo Salado, afluente del primero llevan agua suficiente para practicar la pesca deportiva. Tal es la afición que incluso de ahí surgió la idea de construir y explotar al lado del río una piscifactoría de truchas, a la postre de esturiones también. Este negocio se ha podido incluso colgar medallas de ecológico dando productos de la más alta calidad como truchas de gran porte, carne de esturión y caviar, según dicen, uno de los mejores del mundo. Esta piscifactoría a la vez de nutrir ambas cuencas con truchas, colabora en la recuperación de la especie autóctona (Salmo trutta), muy amenazada en sus hábitats por su prima cercana pero alóctona y más grande, trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss). De hecho se ha llegado a integrar tanto en el medio que han colocado estratégicamente lagunillas o remansos que sirvan como depuradoras naturales a los residuos orgánicos que por lógica se acumulan en la producción piscícola; los mismos son usados por aves y peces para establecerse y ampliar los nichos ecológicos y sus hábitat vitales.

Truchas de la piscifactoría

Piscifactoría de Riofrío

Salida de aguas de la piscifactoría
El éxito radica en las aguas neutras de estos ríos ofrecen unas características de velocidad, pureza y oxigenación ideales para la cría de trucha. En general, a lo largo de los tramos del río Frío y Salado, gracias a su geomorfología, existen innumerables pozas tanto en zonas abiertas como en los espacios en los que el cauce se encaja entre la maleza del bosque de galería de álamos, sauces y eucaliptos. Resumiendo, el paraíso de las truchas.

Rabilargo (Cyanopica cyanus) en el bosque de galería de Riofrío

Paseo por la ribera de Riofrío
Con todo ello, es difícil argumentar por qué no existe ningún tipo de protección medioambiental para este paraje. Partiendo de la base de que ninguna de las estribaciones de Sierra de Loja, ni siquiera Sierra Gorda, de la que nacen río Frío y Salado, cuenta con protección alguna, poco hay que darle vueltas al tarro…Pese a ser joyas geopaisajísticas y botánicas, y pese a contar con escosistemas tan únicos y vulnerables como la Charca del Negro y otras tantas que pueden enorgullecerse de mantener poblaciones sanad de uno de los anfibios más amenazados, el gallipato (Pleurodeltes walt), no parece haber voluntad de proteger.

LiLi en arroyo Salado

Arroyo Salado

Señalización de los senderos
Es muy contradictorio pues que estas zonas de Poniente Granadino tengan tanta riqueza botánica y animal, tanta calidad del agua de sus cauces y tanta naturaleza pura y dura. Volvemos a mi entender pues a la voluntad de los vecinos de las zonas involucradas. Se bien por interés económico, por cultura de siglos ligada a estos ambientes o por porvenir, estoy convencido que sus gentes siguen sintiendo suya la naturaleza, la vida. Por ello la protegen…hay mucho que aprender, pero mirar a los pequeños a veces requiere poner atención y pararse a pensar si nosotros, los grandes (al menos de población), estamos haciendo bien las cosas. A los vecinos de Riofrío, la Venta del Rayo y las demás pedanías de la Sierra de Loja, esta cultura de pasión y respeto por el medio parece sobrarles.

Fondo de río de Riofrío
En este sentido, el cruce de los dos cauces protagonistas con el pueblo es una viva imagen de todo lo que he comentado. Normalmente se les considera obstáculos a salvar, se les encajona o se desvían o defenestran. En Riofrío se cuidan. Los dos cauces llegan como lo que son, ríos con sus riberas, ríos con sus vaivenes, RÍOS. Parece obvio pero impresiona ver cómo han conjugado turismo, economía y naturaleza para dar con la fórmula de sostenibilidad casi perfecta. Salvo pequeñas modificaciones, los cauces son los que son y sus riberas las que son; ni artificios, ni salvedades, ni peros. De hecho se han habilitado sendas respetuosas a las márgenes e incluso un paseo en la margen de río Frío en el que había más espacio. Cuesta creer lo tranquilo del espacio, lo bien que se conjugan vecinos y aves canturreras. Prácticamente es como volver a lo que fuimos, parte del medio. No tiene desperdicio.

Abejas en la vegetación de Riofrío

Riberas de Riofrío
Podemos observar decenas de aves de ribera, golondrinas e incluso anátidas que, en la época propicia, incluso crían cerca del paseo en los ramales de sus alrededores y en las pozas cercanas. Todo un espectáculo fácil de mostrar por su accesibilidad a niños en su más tierna infancia. Para que vayan cogiéndole el gustillo a la naturaleza.

Ánades reales en Riofrío

Cría de ánade real

Cría de ánade real

Ánade real (Anas platyrhynchos) en la ribera del Riofrío
A poco trecho desde la entrada del pueblo, podemos llegar al manantial de los Molinos o del Nacimiento para disfrutar de una de las surgencias que nutre al río Frío. Su caída en cascadas medianas nos muestra la cantidad de agua que guarda el sistema kárstico de Sierra Gorda. Más allá siguen las sendas cada vez, incluso si cabe, más naturales y más abiertas (hasta 5 metros de ancho de cauce). Por su parte, las sendas por arroyo Salado son más peregrinas y se acercan más a las viviendas al menos dentro del pueblo; como to, más arriba mejora. En próximas visitas trataré de alcanzar los cauces altos de ambos ríos y sus nacimientos. ¡Ardo en deseos!

Mariposa en la ribera del arroyo Salado

Fuente del paseo de Riofrío
Nos vemos!
Lo mejor: Trucha, esturión, caviar, sendas, agua, aves, sostenibilidad.
Lo peor: Poco…quizás la baja protección legal y la multitudinaria afluencia de gente, por otro lado bastante respetuosa generalemente.
Más Info:
http://waste.ideal.es/riofrio.htm
https://www.youtube.com/watch?v=hQsQh4mSpIA
http://www.andalucia.com/province/granada/riofrio.htm
http://www.andalucia.org/es/destinos/provincias/granada/municipios/riofrio/
Río Castril (Castril) 02.11.13
Nacimiento del Río Castril
Muy buenas de nuevo!
Mi perrita Zooey explorando los karsts
Río Castril
Volvemos a la carga con una de las visitas que más ganas tenía de realizar: Castril. Este pueblo del norte de Granada es la puerta al Parque Natural del Castril, colindante y vecino del afamado Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, a quien no tiene nada que envidiar ni en biodiversidad ni en paisajes. Castril es una de mis zonas favoritas porque se enclava en terreno calizo y, por si no lo habíais notado, me encanta. Pero no me encanta por cualquier razón, sino porque los karst y demás formaciones dolomíticas dan lugar a algunos de los paisajes más extraños y hermosos de la naturaleza, seleccionan una flora muy particular y crean cientos de ecosistemas y hábitats extremadamente curiosos…, pues bien, Castril reúne mucho de todo lo que menciono. Es un paraíso de formas, agua y vida. Por desgracia sufre mucha presión humana desde muchos frentes y a muchos niveles…considero poco su catalogación como Parque Natural. La conservación de toda la zona incluyendo Cazorla, Segura y las Villas como Parque Nacional debería empezar a contemplarse al menos. Se verá.
Captaciones y retenciones del río Castril
En fin, comenzamos nuestra aventurilla realizando la ruta del nacimiento del río Castril…Bueno, mejor dicho, hacemos de aventureros para llegar a la zona de partida de los senderos ya que tenemos que sortear un carril de tierra que, por muy bien que esté conservado, pone las cosas difíciles. Consejo: no lavar el coche poco antes de la excursión porque va a quedar hecho una pena. Otro consejo: paciencia para no cargarse el coche. Otro más: llegar temprano ya que el ‘aparcamiento’ es escaso y a los dueños de la finca colindante no les agrada que invadan su zona…eso sí, son muy apañados y te indicarán bien cómo ir a los senderos y cómo salir de su propiedad (XD). Si aun así os perdéis, hay muy buena señalización con paneles y guías de madera para cada ruta y por dificultad. Bueeeno…una vez empezamos a andar, nos encontramos con un río lleno de vida y con orillas bastante espesas, pero con claros que permiten acercarse al cauce y disfrutar del sonido y la visión del agua corriendo. No tiene precio. Pero también vemos algunos de los golpes del ser humano en forma de canalización, captaciones y represas. Recuerdo que la excursión es por el NACIMIENTO…desde que nace ya está bastante controlado. A parte, a poco que leáis sobre el tema, veréis también que está bastante mal gestionado su uso…Como joder sabemos, jodamos. Al menos el río es un campeón y mantienen una rivera preciosa y un paisaje impresionante.
De cualquier manera el paseo es increíblemente hermoso y lleno de sorpresas, además de muy sencillo y con poca dificultad. Disfrutad de las panorámicas. A lo largo de la ruta podréis ver señalizados muchos senderos a parte de la ruta del nacimiento que también son muy interesantes amén de más duras, probadlas. De cualquier manera, muchas de ellas os llevarán antes o después a pasar por el nacimiento del río. Para llegar al mismo, deberéis realizar la parte más ‘dura’ del recorrido empezando la parte más caliza del recorrido y, por tanto, más rocosa y rica en paisaje y momentos inesperados. Una vez empecéis la escalada empezaréis a ver los caños y surgencias que forman el nacimiento del río Castril. Se trata de una serie de emanaciones casi de la misma piedra que forman cascadas y rellanos llenos de vegetación rocosa en la que predominan hepáticas y musgos. Dentro de lo por arbóreo del entorno fuera de la ribera, esta pequeña zona encañonada es como un vergel en el desierto.
Caños y surgencias en el nacimiento del río Castril
Pero no os quedéis ahí, los picos que rodean y forman una especie de caldera, más allá de las rocas del nacimiento, son el verdadero origen del río. Sin embargo, por las condiciones propias de un terreno kárstico como este (lo reconozco, me encanta este tipo de terrenos). Por periodos esta dolina se encuentra habitualmente no inundada. Pese a todo, acercaos porque merece la pena ver cómo se nota que la zona es frondosa en plantas ya que el nivel freático (profundidad a la que se encuentra el agua bajo el suelo) está muy cerca de la superficie. El juego de luces y sombras y las formas imposibles labradas en la roca, así como los extraños parajes abruptos en los que a veces nos sorprenden encinas y otros árboles y arbustos más riparios (de bosque de ribera) hacen de este un lugar perfecto para pasar un rato descansando antes de volver. Si os animáis a seguir las rutas más complejas llegaréis a ver un tejo milenario y podréis ver todo el paraje casi cresteando la formación de la sierra, todo un lujo. Entre los animales que podéis encontrar, tratad de dar con las distintas mariposas, muy abundantes y diferentes, así como muchos saltamontes y muchos tipos de abejas y abejorros, amén de muchos más insectos…¡el paraíso de los entomólogos! En serio, lo disfrutaréis por lo fáciles de encontrar que son a lo largo de todo el paraje y los distintos tipos de roquedos y matorrales. Os dejo un vídeo de un matorral repleto de muchos tipos de mariposas que encontramos. Pero no os procupéis los pajareros, como bien sabéis, los karst son buenísimas zonas de observación así que…no tengo que decir más jeje
Abejorro común (Bombus terrestris)
Pero no penséis que este es el final. Para acabar el día, nada mejor que acercaros al pueblo de Castril y sigáis la senda del río por sus calles y lleguéis hasta las pasarelas del cañón. Este paraje de pasarelas permite disfrutar de una experiencia muy enriquecedora ya que normalmente no podemos disfrutar de un cañón casi a vista de pájaro. Vistas, biodiversidad…todo cambia desde la pasarela. Desde luego tomaréis más de una buena instantánea y descuidad, su estado es inmejorable así que no temáis por si os caéis. No os perdáis esta experiencia por el miedo a la altura ya que pocas veces podemos ver escenas tan impresionantes de una forma tan bien integrada en el medio.
Pasarelas sobre el cañón del río Castril
Lo dicho, primera toma de contacto con Cástril, su sierra y su río. Será la primera de otras tantas y espero que os animéis a acercaros. Nos vemos pronto con más humedales!
Lo mejor: pasarelas, paisaje kárstico, surgencias del nacimiento, rutas y señalización
Lo peor: enorme presión humana, captaciones excesivas
Para más información:
http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/servtc5/ventana/resultadoPublicacionesEUPAction.do?tipo=EN&idEspacio=7342
Haz clic para acceder a 29397.pdf
http://www.riocastril.com/
http://www.iagua.es/noticias/planificacion/13/09/17/la-plataforma-por-la-defensa-del-rio-castril-recurre-el-plan-hidrologico-del-guadalquivir-36688
Charco del Negro – Lagunas de Sierra de Loja (Loja) 13.04.13
Panorámica del Charco del Negro
Hola de Nuevo! Hacía tiempo que no incluía en mis fines de semana una pequeña ruta para mejorar el blog, pero no hay mejor forma de volver que con una zona tan única y llena de sorpresas como el Charco del Negro.
Charco subsidiario de la dolina del Charco del Negro
Lili y Zooey posando frente al Charco del Negro
Un momento para aclarar conceptos:
Karst o kárstico– Con el nombre de karst (de Karst nombre alemán de la región eslovena de Carso), relieve kárstico, carst o carso se conoce a una forma de relieve originada por meteorización química de determinadas rocas, como la caliza, dolomía, yeso, etc., compuestas por minerales solubles en agua. Los hay muy conocidos en el sur de España como el Karst de Sorbas en Almería o el Torcal de Antequera en Málaga.
Macrófito– Son aquellas plantas vasculares y no vasculares que viven ecosistemas acuáticos o muy ligadas a sus zonas de encharcamiento y/o inundación. Generalmente se entiende que son esas plantas que llamamos ‘algas’ dentro de los humedales, pero si nos paramos a mirarlas, podemos ver que algunas producen flores en la superficie del agua, otras crecen formando flotando sobre el agua, pueden formar filamentos en sus orillas, tienen hojas y tallos, etc. Así pues, se consideran macrófitos a las plantas que crecen ligadas a las capas de agua dulce, bien bajo ellas, bien sobre ellas, bien entre ellas y la zona de tierra que encharcan. Algunos ejemplos de nuestra tierra son las lentejas de agua, carrizos, ranúnculos, nenúfares…
Macrófitos
Continuamos. La gracia de hacer una visita por estos lares a los que sólo se llega por caminos de tierra, a parte de su encanto (por descontado), es la posibilidad única de poder hacer un safari fotográfico de anfibios. Si, como me ocurre a mi, tenéis especial debilidad por este tipo de bichos estáis de muy enhorabuena ya que tanto en este charco como en el resto de lagunas de la Sierra de Loja (que pronto visitaremos), podréis disfrutar de una variedad enorme: desde el sapo partero hasta la ranita perezzi, pasando por el escurridizo tritón, podemos encontrar casi cualquier familia de estos pringosetes y entrañables animalejos. Pero ojo, la mayoría está sometida a mucha presión por contaminación, reducción de hábitat y áreas de reproducción e incluso por caza furtiva, venenos y cambio climático…Por mucho menos busco yo nuevo vecindario, pero ahí están, aguantando. Por ello os pido que conozcáis, fotografiéis y los disfrutéis, pero evitad molestarlos o tratar de tocarlos, son muy sensibles y no hace falta dárselas de ‘Frank de la jungla’ para pasar un buen día de anfibios (o cualquier otro bicho). Para coronar y haceros la boca agua, he dejado para el comentario final la clave de este enclave: Pleurodeles walt, o lo que es lo mismo, el gallipato. Este animaillo precioso y muchas veces vinculado a la magia y el exoterismo, encuentra en estos parajes uno de sus últimos reductos. Con un poco de sigilo y un día sin viento podéis ver por la vertiente sur-sureste del charco (donde está construida la cubeta de contención) y entre los macrófitos, una población excelente. En este punto entra en juego el papel crucial del afloramiento subsidiario, ya que permite expandir de forma temporal las zonas de cría tanto de gallipatos como de todos los demás anfibios, lo que aumenta sus probabilidades de supervivencia, ahí es poco. Y parecía la hermana fea del cuento. En mi visita llegué a contar hasta 15 adultos de buen tamaño. Merece la pena.
Gallipato (Pleurodeltes walt)
Gallipatos entre los macrófitos del Chacro
Nota: con más suerte también podéis verlos en las lagunas de Albolote y en las del Padul.
Sin embargo no sólo de gallipato vive el GeAfilo (palabrota que define a los seguidores de este blog XD), y eso que es una joya. Por eso, también he de deciros que es una zona muy buena para observar aves como pequeños paseriformes e incluso roqueros y buitres con algo de suerte. Todo el intrincado kárstico favorece huecos, oquedades, agujeros, cortados y demás abruptos rasgos geológicos donde anidar, cazar y reproducirse. Es el lugar ideal para aquellos ver pequeños plumíferos que llamamos paseriformes. Entre otros, Lili, Zooey y yo pudimos ver mientras serpenteábamos para acceder al Charco algunas como la cojugada común (Galerida cristata) o la collalba rubia (Oenanthe hispanica).
Cojugada común (Galerida cristata)
Collalba rubia (Oenanthe hispanica)
Por otra parte, pese a su imagen de ‘monte pelao’, merece la pena darse una vuelta descubriendo las distintas series de vegetación de esta sierra así como las distintas especies que rodean el Charco del Negro. De esta forma, aunque no veremos muchos árboles, veremos ejemplares de con porte de crecimiento matorral perfectamente adaptados a los potentes vientos de la zona (os costará daros cuenta de que son encinas chaparras y quejigos, pero echadle imaginación). Estos individuos son todo un tesoro, tanto por su adaptación como por su papel fundamental como hitos y refugios para los animales de la zona (no todo va a ser corretear con la cara al viento). Sin embargo, serán mucho más abundantes los matorrales bajos de genista y retama, así como las formaciones de tomillo y salvia; todos ellos propician la vida lagartijuna y de pequeños mamíferos roedores, los cuales o vais por la noche y le echáis paciencia o, directamente, me creéis ciegamente y sois felices durmiendo sobre colchón (entre el viento y lo rocoso del terreno no se si esta zona merece mucho la pena, pero se comenta que se pueden ver bien musarañas corretear por entre las quebradas del krast…psss, secreto eh?). Quiero centrar la atención en que si vais en primavera (a parte de no tener mucho problema de alergia gracias a la altura, lo que nunca está de más) podréis ver muchos tipos de flores adaptadas a esta regiones calizas a cual más bonita. Otro tipo de safari fotográfico con objetivos más fáciles (no se mueven), así que enfocad bien y disfrutad de la variedad de formas y colores que la Sierra de Loja y las inmediaciones del Charco del Negro os ofrecen.
Por contra, no podemos olvidar que lo idílico muchas veces no lo es tanto y si, tenemos que hablar de cosas serias también en este paraje. Este charco ha soportado a lo largo de los últimas décadas adecuaciones de la cubeta y reexcavación de sus fondos, lo cual alteró mucho la flora macrófita y degradó, por tanto, el delicado ecosistema. por otra parte, la ganadería es muy frecuente en la zona y solía provocar problemas de nitrificación/eutrofización en los dos afloramientos, pero últimamente el uso de abrevadero y pastoreo se regula mejor y se trata de preservar la zona. Pese a ello, la presión ganadera es enorme y veréis varios rebaños de ovejas y naves de cría por los alrededores. El problema de la nitrificción es que en un sistema tan oligotrófico (el agua no tiene casi minerales disueltos por la propia condición del karst) que incrementos leves de nitrógeno pueden desequilibrar la zona haciendo crecer más de lo debido los macrófitos, y esto afectar a los anfibios (muy delicado todo). Por otra parte, la cantidad de mosquitos se multiplica y, a parte de generar problemas de salud, no aportan nada; deberían estar muy controlados para evitar transmisión de enfermedades entre animales salvajes y de granja y viceversa. Por esto, podemos ver que no hay problema pequeño ni aislado en el ecosistema, y menos en uno tan delicado. No pasa desapercibido si sabes cómo mirar.
Estos problemas son más o menos controlables, sin embargo, los siguientes son un poco más peliagudos. Por una parte, en los alrededores hay varias zonas de extracción de áridos (calcitas, mármol) y eso siempre inquieta porque nunca se sabe hasta dónde cavarán, cuanto polvo levantarán ni cómo afectará a las zonas geológicas cercanas, pero de momento, las zonas lacustres están específicamente protegidas frente a ellas, y eso pese a ser zonas muy golosas para la extracción. Crucemos los dedos. Por otra parte, se ha establecido un gran parque eólico en el entorno que a parte de generar energía limpia, genera mucho ruido. Para los anfibios no es gran problema, pero si hablamos de pájaros, todos sabemos que no es bueno. Dado que el viento y sus corrientes condicionan sus vuelos, estos aparatos pueden ser algo conflictivos. Personalmente creo que hay muchos otros sitios mejores que un paraje delicado y ‘protegido’ (zona LIC). No se, lo mismo soy muy ecofanático. Lo mismo, no.
Además de visitas naturales, podemos aprovechar para encaramarnos a la madre montaña haciendo escaladas por varias rutas cercanas. Si preferimos andar sobre firme horizontal, existen rutas de senderismo bien señalizadas, con paneles indicativos e informativos en buen estado y muy útiles, pero no olvidéis respetar la naturaleza y las épocas de cría de las aves. ¡Todo son opciones en esta zona como podéis ver!
Espero haberos convencido. Visitad, conoced y divulgad 🙂
Lo mejor: Gallipato, geología-paisajes, macrófitos.
Lo peor: Mosquitos, ruido de aerogeneradores, socavones de minería.
Links para ampliar:
http://waste.ideal.es/charcodelnegro.html
Haz clic para acceder a charco_del_negro_ficha.pdf