Archivo de la categoría: Recursos Hídricos

22 de Marzo, Día Mundial del Agua

Muy buenas!

Si hay un día para esta web, a parte del de los Humedales el 2 de Febrero, es el Día Mundial del Agua!

Este año el lema es ‘Agua y Desarrollo Sostenible’, buscando resaltar las bondades y la lata necesidad de gestionar el agua para todas las personas del mundo como un bien escaso y preciado! Os dejo con las palabras del Secretatio General de la ONU:

«Para eliminar los múltiples problemas relacionados con el agua, debemos trabajar con un espíritu de cooperación urgente, con mente abierta a las nuevas ideas y la innovación, y dispuestos a compartir las soluciones que todos necesitamos para un futuro sostenible.»

Mensaje del Secretario General Ban Ki-moon en el Día Mundial del Agua,
22 de marzo de 2015

El tema del Día Mundial del Agua de 2015 es: «Agua y Desarrollo Sostenible».

Un joven pescador en gafas de madera en la isla Atauro, Timor-Leste.

ONU/Martine Perret

La humanidad necesita agua

Una gota de agua es flexible. Una gota de agua es poderosa. Una gota de agua es más necesaria que nunca.

El agua es un elemento esencial del desarrollo sostenible. Los recursos hídricos, y la gama de servicios que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental. El agua propicia el bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad alimentaria y energética, la salud humana y al medio ambiente.

2015: Agua y Desarrollo Sostenible

El tema de 2015 trata la relación del agua con todas las áreas que debemos tener en cuenta para crear el futuro que queremos. Aprenda más sobre el tema aquí: www.worldwaterday.org/learn y únase a las celebraciones mundiales para organizar su propio evento en http://www.unwater.org/worldwaterday/events.

Únase a la campaña de 2015 para crear conciencia sobre el agua y el saneamiento. También puede contribuir en los medios sociales, con el hashtag #díamundialdelagua.

El Día Mundial del Agua se celebra el 22 de marzo de cada año. Es un día para destacar la función esencial del agua y propiciar mejoras para la población mundial que sufre de problemas relacionados con el agua. Es un día para debatir cómo debemos gestionar los recursos hídricos en el futuro. En 1993, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 22 de marzo como el primer Día Mundial del Agua. Han pasado 22 años y el Día Mundial del Agua se sigue celebrando en todo el mundo y cada año destaca una cuestión diferente.

¿Esclusas o Excusas? Río Genil

Muy buenas! Hoy viernes nueva entrega para Granada, agua oculta que llora…Espacio para reflexionar sobre el agua en Granada. Hoy, el río Genil, espero que os guste!

‘Desembocadura’ del Darro en las esclusas del Genil

Vertebra buenamente Granada y define barrios enteros. Identidad inalienable de la capital nazarí y de la Andalucía de las montañas. Parte del intrincado de ser granadino y símbolo cultural y ambiental. Maltrato ambiental patente y desgracia ingenieril. Cuando un problema acaba en esta solución parca, poco imaginativa y desnaturalizadora…eso, se llama Genil. Vergüenza también podría unirse a la larga lista de atributos que nos desvela el majestuoso cauce que día a día nos acompaña y que día a día vemos y dejamos morir.

Ahora los lechos son de muebles, no de tierra

Basuras, cascotes, plásticos…mierda. El Genil es un río de mierda. No nos engañemos con localismos y orgullos velados. Una cloaca de buenas y pomposas dimensiones fue la solución del marco de control hídrico de la época para nuestro río emblema. Con un par. Porque un río siempre puede ser una cañería gorda donde ir tirando aguas abajo sin mayor problema. El problema es que el horror de hormigón lo vemos a diario sin hacer nada. Dicen que la costumbre es las que verdaderamente encadena al esclavo y no la mano que blande el látigo. No nos hace falta ya que nos fustiguen para asimilar que nuestro canal de lecho cementado, riberas cementadas y zona de inundación requetecementada, es el modelo de río ‘seguro’ que debería ser. Inundaciones! Catástrofes! Riadas! Dios mío que alguien lo controle. Modernicemos este pueblo cementando sobre nuestras raíces…gran idea comenzada en los 70 por Martín Larios y concluida a base de error tras error en los 90 con las famosas e increíblemente prácticas esclusas. Y sí, en Granada también llueve y deshiela, fortuna de los oriundos. Pero que la solución pase por hacer un cementado cementerio del cauce me hace reír con tristeza. Pero espera, aún mejor…y si le ponemos unas esclusas bonicas de verdad que tenga donde acumularse el maltrecho ‘caudal ecológico’ que no vamos a respetar ni de coña? A que estaría genial que por tramos, así que se vea muy natural, se llene una buena parte del río? Idea de las buenas. Sopesada e inteligente. Hay gente que merece una placa, en este caso que diga: ‘Al señor ingeniero Fulanito de Copas y Copetines, digno emisario de la codicia, el defenestro y la ignominia de la humanidad. Por siempre honor y gloria allí donde descanse en paz. Tanta de la misma lleve como descanso deja’…En la gloria se quedaría el muchacho.

Basura acumulada en los terraplenes

Las esclusas retienen la vergüenza

En este caso no voy a pasar de las esclusas. Delimites los infinitos problemas de nuestro río para poder atajarlo mejor, ya que tanta desgracia o se dosifica o no se puede afrontar. Baja de Cenes hasta el canal de aguas brevas y Puente Verde un río medianamente bonito y riberado en buena parte. Incluso agradable y con cierta gracia naturalizado al entrar en Granada. Y punto…como si el mismo Dante hubiera designado el resto de la obra hasta abandonar el tramo de 3 Km en que cruza la ciudad, conviene doblar la vista ante el espectáculo infernal ambiental y paisajísticamente. Que el turismo venga a ver esto, por favor…O mejor, que busquen el Darro tras hacerse ojos del Guadiana en el Paseo de los Tristes y llegar a desembocar en otra obra ingenieril magnífica de la que hablaremos otro día. Vergüenza. A poco que entra pasada Bola de Oro hasta Puente Verde y abandonamos la mencionada ‘graciosa’ naturalización, finito. Comienzan las esclusas…Encanulado el río, no vaya a ser que ruja, lo pasamos al cemento armado del peor que pudiéramos encontrar. Armarse de paciencia toca por lo faraónico de una obra que parece querer contener al mismísimo Amazonas. Que crecer, crece, señores, pero el día que haga los buenos metros de profundidad excavada y hormigonada que baje Dios y lo vea…Bueno mejor que no baje que se arrepiente otra vez de la creación y ya verás que se llena el canalillo y nos pasan tres cuartas de agua por encima de la Torre de la Vela.

Paso a una de las últimas esclusas para acumular el agua

Esclusas…A mí me suena mucho e indefectiblemente a excusas. Malas excusas para buscar que ‘se vea agua a su paso’. Mentes que piensan, gente que estudia… Brillante…brillante mierda. Desde un corazón ambientólogo os digo que si el impacto fuera más doloroso, esto producía combustión espontánea. Pero vamos a ver, queremos evitar crecidas, cavamos como si no hubiera antípodas a las que llegar, etc., pero luego impermeabilizas el lecho y colocas esclusas para que acumule el agua y haga bonito. Lógico, muy lógico. Aguas debajo de la Inmaculada a lo mejor está mejor diseñado: riberas reconstruidas, lecho abierto, senderos para disfrutarlo…Pero eso en medio de una ciudad moderna…no, caballero, aquí nos mola el cemen-terio bien montado, si queremos agua la vamos frenando.

Espumas, eutrofización y basuras un día cualquiera

 Qué produce todo esto? Mierda, mucha mierda…pero literal: fondos enfangados, sulfuraciones gaseosas, retención de polivalentes basuras, eutrofización como en pocos sitios…Este último creo que ya no se puede tratar ni de eso. Mejor decir costras que asquea a la par que revela identidades. Costras de algas y mierda…y aceites y espumas…y carritos de la compra y papeles…Me la juego a que la misma vida microbiológica extrema que sobrevive y coloniza los caños sulfurosos ácidos de Yellowstone, se caga viva si le mandamos meterse ahí. Digno de estudio. Pero espera, lo mejor de las esclusas…son para oxigenar….ya, si. Es cierto que oxigenan, pero vaya, echo un chorreón de agua oxigenada y ayudo más…Si cada salto de esclusa es un vertedero, si la mierda se acumula tanto que es como querer limpiar el barro y separarle el agua con un colador fino…Lo mismo es mucho hacer pensar a las mentes pensantes. Básicamente, si hay mucha mierda, por mucho que cueles, va a salir mucha mierda.

Bonita costra de mierda cualquier día del año

Y es que cuesta mucho menos atender a la razón y dejar de deshumanizarno, es más, díría, renaturalizarnos. Tenemos los humos muy subidos, pero no somos más que una especie de la naturaleza, por mucho que nos empeñemos en lo contrario. De ella manamos y dependemos. Mejor hacerle caso que retarla continuamente, que destrozarla con la falsa excusa de controlarla y protegernos. Cada año el gasto de limpieza y desbroce de ese pequeño tramo, el control de olores, la recogida de basuras, la limpieza de nuestras ya carismáticas costras (algún alcalde casposo seguro que acaba creando una figura de protección, sino al tiempo), etc. Cuestan a la ciudad y sus habitantes lastimeros y condescendientes una friolera de hasta 20.000 euros anuales más hasta 300.000-500.000 para las tareas especiales de limpieza cada varios meses. Con un par bien puesto. Con un par o menos de esos presupuestos pueden adecuarse riberas, permeabilizar el lecho, crear espacios verdes para el deporte y el ocio, revegetar riberas, gravillar y roquear los márgenes, permitir el cascadeo y el vaivén general del río, alegrar los corazones de los niños en lugar de tener que anclar sus dedos a sus fosas nasales al pasar, alargar la vida natural hasta el infinito, darle un impulso paisajístico y turístico a la zona, crear sonrisas, mejorar atardeceres, aliviar los pesares diarios ante las aves y su canturreo…No sé si me explico, valor tangible y reinado de lo intangible. Llenarnos el corazón y el alma de pureza. Me parece barato. Me parece inconsciente y beligerante no recuperar lo que es nuestro a un pasado más triste y desfasado hasta límites estúpidos.

Sobre el cemento y pese a todo, la naturaleza lo intenta…

El valor de lavanderas y murciélagos no lo pongo en duda, pero ver ruiseñores y mochuelos, luciérnagas y grillos, crear tantos posibles ambientes, ganarle a la ignorancia tecnócrata un río de verdad para nosotros y nuestros hijos…Eso, si me parece de capital importancia. Porque el hecho de heredar una carga no implica tener que pasarla. Porque la costumbre de aceptar y bajar la cabeza sólo nos lleva a morir sin vivir. Llevaré de la mano un día a mis hijos a ver Granada y tendré que decirles como mi padre a mí junto a la ribera del Genil, ‘hijo, aquí empieza y acaba la dignidad del granadino…pero mira, no dejes de mirar, porque cuanto más te duela, menos te abnegarás a aceptar’. Animal de costumbres, acostúmbrate a querer algo mejor…que te dejen de prometer catetadas como camiones. Queremos ser más y es que nos tiran un trozo de panceta y nos dan palmas y nos ponemos panza arriba o a hacer fiestas al cacique de turno. Ya no hablo de nivel cultural, que no espero el mínimo de ningún político, hablo de dignidad como pueblo granadino. A mí que no me prometan LAC, teleférico a la Sierra, tranvía-metro/chufla venida a más…Si de verdad te duele tu tierra, respétala, dale vida y no la dejes morir pasivamente. Quiero una Vega  fértil y protegida, quiero una ciudad de la Alhambra cuidada, unos parques verdes y llenos de alegría…y un río que no me dé vergüenza enseñar…Es más, me atrevo a pedir, quiero un río restaurado, quiero vida en ambos márgenes, quiero que me llenen los cantos de los pajarillos por las mañanas y los chirridos de murciélago en los atardeceres, quiero que la luz la traigan las luciérnagas y que las ranas entonen para mi cita romántica un sábado en el paseo por la ribera que quiero, quiero que salte una trucha antes de besarla y que una nutria nos salude juguetona. Estoy enamorado de Granada, de su agua, de su gente. Quiero, y lo quiero ahora.

Canalización sostenible de altura, por Sergio Martín

Muy buenas!

Hoy me he topado con esta interesante reflexión de un buen amigo, un gran profesional y una mejor persona, Sergio Martín (@). No quería dejar pasar la oportunidad de compartirlo con vosotros y aquí os dejo el reposteo desde iAgua para que le echéis un vistazo. No os dejará indiferentes!

Canalización sostenible de altura

El concepto de “Desarrollo Sostenible” se formalizó en el llamado “Informe Brundtland”, en 1987. Pero el desarrollo sostenible se llevaba a cabo mucho antes y en diferentes localizaciones. Un ejemplo lo tenemos en el macizo montañoso que los árabes llamaban Sulayr, o montaña del sol.

Sierra Nevada ha sido una de las montañas más antropizadas, desde la media montaña hasta las altas cumbres. Famosos son los neveros, que llenaros la sierra de senderos siempre acompañados de sus mulas. Los románticos y naturalistas que veían esta sierra como fuente de inspiración y tesoro botánico. Pero fueron otros, los llamados acequieros, los que de verdad aprovecharon uno de los recursos más valiosos de esta montaña, el agua. Y lo hicieron a través de canalizaciones que recorren Sierra Nevada y transportaban este bien tan preciado hasta donde era requerido.

A partir de los dos mil metros, existe una gran cantidad de agua acumulada en forma de nieve durante varios meses al año, así que Sierra Nevada es como un gran embalse. Estos acequieros aprovecharon de la mejor manera ese agua, y “tejieron” una red de acequias.  Pero no unas cualquiera, sino las llamadas acequias de careo, que permiten la infiltración del agua en la montaña a través de “calaeros” o simas, para que posteriormente nutra a un manantial. Algunos de ellos se pueden encontrar a más de mil metros de desnivel, y pueden ser utilizados para regar los cultivos o volver a canalizar el agua surgente en una acequia de riego.

Si indagamos un poco más en estas infraestructuras, nos daremos cuenta de que estos acequieros, de los que no se sabe muy bien el origen, si fue romano o hispanomusulmán, tenían un gran conocimiento de Sierra Nevada y su geomorfología. De esta manera, sabían qué materiales utilizar para su construcción, que lugares eran más permeables y por donde debían de canalizar este agua. Con todos estos conocimientos convirtieron Sierra Nevada en un embalse, de la forma más sostenible posible.

Estos canalizadores, utilizaban materiales del propio terreno. Las altas cumbres están formadas por materiales silíceos, como pizarras, esquistos o filitas. Estas “lajas” eran utilizadas para la construcción de la acequias, y utilizando diferentes técnicas, los acequieros hacían la base de una manera distinta, según la velocidad y la impermeabilización que se buscara en cada tramo. Estos mismos materiales se han utilizado posteriormente para la construcción de cortijos en toda Sierra Nevada, y también constituían la “launa”, que se utilizaba para impermeabilizar los techos en las construcciones alpujarreñas. Junto a las acequias se encuentran además los caminos de los acequieros, que discurren paralelamente a ellas. Existe el hecho de que se construían en una ladera, ya que su misión era recoger el agua del deshielo. Esto conlleva un mantenimiento y unas medidas de corrección del impacto producido por la construcción, ya que el riesgo de erosión o desprendimiento era muy alto. Muros de contención y la revegetación del talud eran algunas de las medidas que utilizaban.

Sorprendente es que, después de todas estas alteraciones, al cabo del tiempo la estructura quede totalmente integrada en el paisaje, es más, llegue a formar parte de él, otro gran punto a favor de su sostenibilidad. En la fotografía que acompaña al artículo, que muestra la Acequia de los Hechos (Nigüelas), podéis ver perfectamente de lo que hablo. Aunque va mucho más allá de la mera integración paisajística.

La acequia de careo forma un verdadero ecosistema a su paso, que en algunas ocasiones puede albergar una gran biodiversidad y muy valiosa, ya que se pueden encontrar endemismos botánicos o de entomofauna que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo.

Las constantes filtraciones de estas acequias forman “borreguiles”,  llamados así por su uso ganadero, que tinta el paisaje de verde, haciendo un fuerte contraste con el paisaje de piornal. Por lo tanto, la mayoría de la vegetación que encontraremos alrededor de las canalizaciones serán herbáceas, algunas con nombres tan curiosos comoAconitum burnatii  (Revientavacas) o Rosa canina (Tapaculos).  Especies tóxicas como la Digitalis purpurea (Dedalera) o algunas plantas endémicas de Sierra Nevada como laGentiana verna ssp. sierrae  o Plantago nivalis (Estrella de las Nieves) una planta muy característica, utilizada como símbolo de Sierra Nevada y del sendero de gran recorrido Sulayr (GR-240). También podemos encontrar plantas de porte leñoso como castaños, encinas, robles melojos, majuelos…

La fauna asociada a estas construcciones también es característica. Podemos encontrar  aves, como Prunella collaris (Acentor alpino) ave característica de estas altitudes, y diversas mariposas, como Melanargia lachesis, Satyrus actaea (Sátiro negro), o Parnassius apollo nevadensis (Mariposa Apolo), otra joya de Sierra Nevada que solo se puede encontrar en este macizo. Un insecto endémico y muy curioso que se puede ver por los alrededores de las acequias es la chicharra de montaña (Baetica ustulata), que nos permite ver las adaptaciones de estos insectos a la alta montaña, como su color oscuro, cuerpo robusto y alas atrofiadas. También es fácil ver al ganado alrededor de las acequias, como la Vaca pajuna, haciendo uso del pasto que se genera al paso de la acequia.

Queda demostrado que las acequias de careo son construcciones que respetan el modelo de desarrollo sostenible y que lo llevan más allá.

La faceta social y económica  de las acequias tuvo su apogeo en los años 60. Existían cuadrillas, a veces intervenía todo el pueblo responsable de la acequia, en labores de mantenimiento y limpieza.  Conocida era la profesión del ramalero, que era el encargado de repartir en partes equitativas el agua entre los miembros de la comunidad de regantes, aunque en la mayoría de las ocasiones el acequiero se encargaba de las dos funciones.

En la actualidad, la mayoría de estas acequias se han perdido o deteriorado gravemente por su desuso y falta de mantenimiento. Quedan contados acequieros, y la profesión está condenada a desaparecer. La pérdida de estas canalizaciones ha supuesto que en fuentes y manantiales deje de surgir agua, y el deterioro del ecosistema asociado a ella.

Aunque no está todo perdido, ya que existen proyectos de restauración de acequias de careo en Sierra Nevada, y la gente es cada vez más consciente de su importancia. ¿Volverán a lucir de nuevo estas acequias como antaño? El tiempo lo dirá. Pongamos lo sostenible de nuevo de moda.

 Noticia completa en su edición digital en la web de iAgua

La reflexión de mi amigo me parece muy completa y enriquecedora, espero os haya gustado y la compartáis para que más gente tome conciencia y pongamos lo sostenible de nuevo de moda!

Paisajes del Agua: Réquiem por un humilde pinar

Paisajes del Agua: Réquiem por un humilde pinar

Muy buenas! Hoy es miércoles y como cada miércoles reposteamos desde la web de nuestro amigo y compañero Antonio Castillo,  Paisajes del Agua. Para hoy os traigo un nuevo post acerca de un tema muy reciente y de actualidad, el incendio de Cenes de la Vega. Hace poco CHG y Agnaden Granada empezaron la reforestación y recuperación. Espero que os guste!

RÉQUIEM POR UN HUMILDE PINAR

 Antonio Castillo
DESTACADA POST. réquiem humilde pinar

Incendio de Cenes

Detalle de parte del pinar quemado, en la margen izquierda del río Genil. Al fondo, las altas cumbres de Sierra Nevada (29 de agosto de 2014)

El verano es tiempo de ríos y de fuentes agostadas, y desgraciadamente también de incendios forestales. Parecía que nos íbamos a librar los granadinos este año, pero no. Me entristece este post, pero he creído oportuno incluirlo como póstumo homenaje al bosque quemado a las mismas puertas de Granada y cómo reflexión sobre la conservación de los espacios verdes periurbanos. Los paisajes del agua también son los de los bosques que la producen, la filtran y nos la ofrecen fresca y limpia. Ahí va pues esta triste historia.

Hace unos días que se quemó. Fue por otro incendio provocado por la mano del hombre (dicen que por una negligencia). Uno más en los alrededores de Cenes de la Vega. Pero, sobre todo, uno más en el cinturón de Granada.

Volcanes pavorosos de humo negro ascendían con rapidez cegando el sol y la localización del origen del fuego. ¡Por Dios!, ¿sería en la Alhambra? (nada más pensarlo sobrecoge el alma), ¿sería en el Llano de la Perdiz?, ¿sería en la Umbría del Generalife?, ¿sería…? No, ya no había muchas más posibilidades. Las demás se fueron reduciendo a ceniza con los años. Al final, se iba confirmando, lo que ardía era el pinar de la Loma del Genil, por frente a Cenes.

Conocía bien esa mancha verde, la había recorrido en numerosas ocasiones. Desde el mismo centro de Granada era una excursión accesible a pie. Bastaba con coger la popular “ruta del Colesterol”, junto al río Genil, para subir a la loma de los Rebites, crestear hasta el collado del Contadero (donde viene a juntarse el Camino de los Neveros) y bajar de nuevo a la vera del río por alguno de los cortafuegos (es un decir) de la loma del Cagil.

Era un humilde pinar de repoblación bastante naturalizado, pero sobre todo era un bosque superviviente, salpicado y acosado por el envite de fuegos anteriores, que había agarrado milagrosamente en suelos pobres entre cárcavas y profundas barranqueras. Era casi la única mancha verde que quedaba al alcance de la mano en ese transitado valle del Genil, la principal vía de escape de los paseantes granadinos, junto a la del valle del Darro.

PANORAMICA VIVA.a

PANORAMICA QUEMADA a

Antes y después del incendio. Fotos tomadas desde Cerro Terreras  (18 de marzo y 29 de agosto de 2014)

¡Pero oiga, tampoco es para ponerse así. Tan solo era un pinar de repoblación, que ni siquiera había sido merecedor de protección alguna!– habrán pensado seguramente algunas personas que no lo conocían. Efectivamente, en sus sombras y frescuras no se refugiaba ningún endemismo animal ni vegetal. Solo un animal muy común lo utilizaba permanentemente, el hombre. Su amable amparo era buscado por gentes de muy diverso pelaje: senderistas, excursionistas, domingueros, parejas, paseadores de perros, corredores, seteros, ciclistas, moteros (que, dicho sea de paso, lo mancillaban en sus pronunciadas veredas y cortafuegos). Esa era su fauna principal, amén de la que descansaba su vista en las copas de los pinos desde el frontero pueblo de Cenes. Por eso me ha dolido especialmente esa pérdida, porque somos muchos los que nos hemos quedado huérfanos de su agradable compañía. Porque ni nosotros ni nuestros hijos lo volverán a ver jamás. Porque a los montes de la ciudad se le ha dado un bocado más. Porque Granada ha perdido otra manchita verde de su maltratado extrarradio, cosido a puñaladas por los criminales incendios, que poco a poco van vistiendo sus lomas de desértico erial.

Los bosques periurbanos son muy valiosos como solaz y disfrute de la ciudadanía, que cada vez aprecia y demanda más esas zonas verdes junto a las ciudades. El Llano de la Perdiz, la Umbría del Generalife, la Alhambra y el Cerro de San Miguel son los pequeños reductos boscosos que todavía le quedan al entorno más próximo a la ciudad, ese al que todavía es posible llegar paseando desde cualquiera de sus calles.

Deberíamos llevar a cabo una valiente y generosa apuesta por esas masas arboladas que aún nos quedan. ¿Se puede hacer algo más por invertir esa dinámica de autodestrucción? La respuesta es rotundamente sí. Los profesionales saben bien lo que hay que hacer, sólo hace falta que los poderes públicos les den más medios (a la larga muy rentables) para el tratamiento de las masas arbóreas, con una mayor autoridad y disciplina ambiental, todo ello en la prevención. Aunque se haya actuado con eficacia en la extinción (siempre costosa) y evitado así males mayores, el fracaso y el despropósito económico (obligado, por supuesto) han sido inevitables. Y ahora toca sumar los gastos de una incierta recuperación ambiental de la zona. Otra vez hemos llegado tarde.

 

Nuevamente me quedo muy sorprendido por el trasfondo que siempre consigue Antonio. A parte de las problemáticas, es bueno pararse a pensar cómo ocurren y la importancia que le damos a las cosas. Cenes tiene el mismo valor que cualquier otra zona, pero nunca se le va a tratar igual. Espero que hayáis disfrutado de este post y valoréis mejor cuánto importa el agua en nuestras vidas. ¡Un fuerte abrazo!

Entrada completa y mucho más joyas en la web de Paisajes del Agua

Proyecto Respira Alhama y el Temple: río Verde

Proyecto Respira Alhama y el Temple: río Verde

Muy buenas! Hoy y como cada lunes publicamos desde webs amigas, esta vez desde Proyecto Respira Alhama y el Temple. En esta ocasión os traemos un post sobre el río Verde, por Cristóbal Hinojosa, que lo disfrutéis!

RÍO VERDE

Cristóbal Hinojosae

Este verano tuvimos la suerte de realizar el descenso de cañones en Río Verde, como actividad de RESPIRA en la que nos acompañaron varios de nuestros amigos. Este tipo de deportes se realizan a través de empresas especializadas del sector de Turismo Activo.

Primer baño tras colocarnos los neoprenos

Esta es una de las actividades más excitantes de las que se pueden realizar en la zona. Pudimos disfrutar de un entorno alucinante en la Sierra de la Almijara, entre el cauce de agua fresca y cristalina, que se baja con total facilidad andando por el interior del río gracias a los trajes de neopreno que nos protegen de la temperatura del agua y los roces que pudieramos darnos.
Las piedras de toba ayudan perfectamente a pisar sin sufrir un resbalón y avanzar así cauce abajo. Nos encontramos con saltos variados a pozas de profundidad considerable que nos hicieron disfrutar mucho. Durante el recorrido se realizaron dos descensos cordados mediante la técnica de rapel que hicieron las delicias del grupo, ya que es una actividad que pone la adrenalina a tope para aquell@s que no lo habían probado antes.

El grupo saluda después del salto ciego de 4 metros

Como colofón pudimos realizar dos saltos adicionales, uno de 9 y otro de 12 metros de altura que sin dudas, pusieron las pulsaciones a tope. Una experiencia increíble y que desde RESPIRA recomendamos al 100%.

Arranque del salto de 12 metros

Posteriormente, nos desplazamos a la zona de acampada del Bacal, en Jayena, donde hicimos la comida en compañía de nuestros amig@s disfrutando de este paraje, de sus sombras, césped, olores a pino y el sonido del río. Sin duda una jornada completa disfrutando plenamente de la naturaleza y de los amigos.
Como véis hay muchas experiencias por vivir en Alhama y el Temple! Con esta nueva colaboración esperamos acercaros muchos aspectos, pero os invitamos fervorosamente a que visitéis la web de Proyecto Respira Alhama y el Temple para ver las entradas completas y multitud de posts sobre etnología, modos de vida, paisajes y experiencias personales sobre esta enigmática y maravillosa tierra de la provincia de Granada. Un fuerte abrazo, geáfilos!
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